SALZBURGO, AUSTRIA
BELLEZA BARROCA
Fotos: TRAVEL ROAD PARTNERS
Salzburgo, un viaje por la arquitectura barroca europea. Patrimonio de la Humanidad
Llegaba a ti desde la imponente y lujosa Viena imperial.
Un hermoso viaje en tren, disfrutando del maravilloso paisaje austríaco, con pueblos pintorescos, paisajes montañosos, verdes valles, ríos y lagos. Todo rezumaba frescura, pureza, vida.
Ya en las jornadas previas sentía el cosquilleo propio de los niños el día antes de la llegada de los Reyes Magos. ¿Se verán cumplidas mis expectativas cuando te vea? ¿Ha de ser verdad todo lo que de ti cuentan?…
A la llegada a la estación todo parecía normal. Trasiego de gente haciendo su vida diaria. Los turistas se mezclaban con el paisanaje por sus pasillos. A la salida de la estación, filas de taxis y buses esperando a la clientela. Allá vamos.
Subimos al trolebús que nos trasladaba a nuestro hotel en las afueras de la ciudad. No es muy asequible dormir bajo tu regazo y lo entiendo. Ya por la tarde nos dirigimos al centro, dispuestos a descubrir tus encantos.
La primera vez que te admiré fue desde el paseo fluvial Elisabethkai. El río Salzach fluía suavemente ofreciendo un paisaje de ensueño. Allí estabas, la ciudad vieja de Salzburgo, imponente y majestuosa.
El río Salzach te trae el agua directa de los Alpes, sus verdes orillas son tu coro de la naturaleza.
Durante un paseo al atardecer en la lancha rápida panorámica contemplando el paisaje y súbitamente la lancha se detiene … y comienza a girar sobre si misma… ante nuestro asombro comienza a sonar un vals… la lancha está bailando con nosotros dentro…acaba el baile en un aplauso colectivo…
Río Salzach
ERES EN SÍ MISMA UNA PERFECTA ESTAMPA
No te falta de nada. Cada rincón de ti es un tesoro. Es difícil hasta mantenerte la mirada. Obra de dioses. Sólo Buonarroti podría diseñar tanto encanto.
Un espléndido decorado de cine para gran parte de la película musical «The Sound of Music» de Robert Wise (1965) «Sonrisas y Lágrimas» y que ya forma parte de la cultura popular universal.
La música resuena en cada esquina
La cuidad de la música dónde este genio que fue Mozart nació y creció. Las sonatas para violín y piano de Mozart, las cenas y concierto en el Palacio de Mirabell, en la fortaleza de Hohensalzburg y los conciertos al aire libre son parte de tu identidad. Un legado que permanecerá en ti para siempre.
Calles laberínticas empedradas, arquitectura imponente salpicada con abadías y torres, con agujas y cúpulas revestidas de cobre con esa pátina verde tan característica; no es de extrañar la elección intencionada de este material que te confiere un toque elegante, señorial y tan decorativo.
La Fortaleza de Hohensalzburg de piedra y acero, testigo privilegiado de batallas y el guardián de secretos de caballeros y damas. El castillo medieval, situado en una colina cual estrella de Oriente, es el faro que guía y anuncia que allí vive la ciudad más hermosa. Incluso los Alpes se acercaron a ti para tenerte bien cerca.
Fue dura la despedida. No quería dejar de verte. Cautivado por tu encanto te dije hasta siempre con los ojos de un forastero sabiendo que como tú, Salzburgo, ninguna.